marzo 06, 2016

Síntesis y conclusiones del Taller de Lectura Nº 83



Síntesis y conclusiones del Taller de Lectura    83

En este Taller hemos abordado dos textos, el primero de Frei Betto titulado: "Descuidar la educación ideológica, grave error" publicado el 28 de enero pasado de 2016 en Prensa Latina y "Tarea de Grandes", por Fernando Martínez Heredia, en la intervención en el Panel “Neoliberalismo, nuevos escenarios en América Latina y el Caribe y el equilibrio del mundo” en la II Conferencia Internacional “Con todos y para el bien de todos”, Palacio de Convenciones, La Habana, 26 de enero de 2016.
Frei Betto considera que el descuido en la formación ideológica de la sociedad es una de las principales causas de los retrocesos sufridos por los gobiernos progresistas de América Latina, donde persiste una sociedad desigual con una permanente lucha de clases donde se ha desarrollado una conciencia más consumista que ciudadana. Tampoco se llevó a cabo una política sostenible, no se han hecho reformas estructurales: reformas agrarias, tributarias, presidenciales, políticas. Se han llevado a cabo políticas cosméticas carentes de raíz, sin fundamentos para su sustentabilidad. Betto también le hizo una crítica al gobierno revolucionario de Cuba que ha hecho un buen trabajo ideológico de educación política con el pueblo, pero ha sido demasiado paternalista. Él considera que es necesaria la educación política, con participación y compromiso efectivo con la lucha, adecuación de la teoría y la práctica. Analiza que la derecha se une por interés, y la izquierda por principios, y cuando la izquierda pierde los principios y comienza a actuar en función de sus intereses, le termina haciendo el juego a la derecha. El capitalismo socializó los sueños para privatizar los bienes materiales Y ahí llega el sufrimiento de los jóvenes que ponen en su vida cuatro valores: el dinero, la fama, el poder y la belleza, y cuando no alcanzan ninguno de esos falsos valores viene la frustración y van siempre a los ansiolíticos y las drogas.
En el segundo texto, Fernando Martínez Heredia manifiesta que América Latina tiene una historia regional singular, que ha sido colonizado y neocolonizado por el capitalismo con la complicidad y el entreguismo de sectores internos. Hoy existe una sola solución válida y eficaz a las necesidades y las crisis que ha confrontado y confronta: hacer revoluciones socialistas de liberación nacional. El dominio imperial ha impedido el desarrollo autónomo de las sociedades pero a finales del siglo XX con el triunfo de Hugo Chávez en Venezuela se inició  una nueva etapa donde ha crecido mucho la conciencia de la necesidad primordial de avanzar hacia una unión latinoamericana y caribeña. Sin embargo a pesar de los notables avances en este siglo, esta región sigue siendo la más desigual del planeta. Se han acumulado logros, fuerzas y expectativas, pero desde puntos de partida que no han destruido los sistemas de dominación, sus reglas de juego político, su legalidad y sus aparatos ideológicos. La idea de liberación nacional, social y humana, ha generado entusiasmo, participación y esperanzas, y se ha recuperado la noción de socialismo. Los países con poderes y transición socialista, y los que han producido transformaciones en esa dirección, no cuentan con un modo de producción enteramente socialista, ni autónomo. Por otro lado hoy resulta de vida o muerte combatir el fatalismo que contienen las posiciones que aceptan nociones como la de “fin de ciclo”, porque en coyunturas difíciles se convierten en derrotismo y desmoralización. Ante los resultados recientes de Argentina y Venezuela, algunos llegan a creer  que si los miserables, los hambrientos y faltos de esperanza son elevados material y socialmente se vuelven “de clase media” y votan contra sus propios benefactores.  Pero hay un hecho innegable: el imperialismo norteamericano y sus aliados subordinados están a la ofensiva. Hacen una guerra sin cuartel a base de la formación de opinión pública mediante su control de los medios de comunicación. Mientras exista la opresión, la explotación y la dominación capitalista, no habrá equilibrio del mundo.

En el transcurso del debate coincidimos en la necesidad repasar nuestra historia y recuperar los principios y valores esenciales que nos enseñaron nuestros próceres, como José Martí en Cuba y Simón Bolívar en Venezuela. Se compendió la necesidad de profundizar los cambios en nuestros países para garantizar la construcción del socialismo. Se dijo que el capitalismo plantea un mundo finito y el socialismo un mundo infinito. Se reconoció que en La Argentina en estos últimos años se ha iniciado un fuerte trabajo de formación ideológica, promoviendo la participación de los jóvenes en el debate. Se comentó que para lograr una buena formación ideológica es imprescindible recuperar primero los principios y los valores. Se planteó la redefinición del concepto de "patria" desde un punto de vista más abarcativo y se recordó la frase de Martí: "Patria es humanidad". Si bien el segundo texto abordado es más complejo, se entendió que es de carácter muy esperanzador ya que revaloriza el espíritu de lucha en la búsqueda del socialismo y el equilibrio del mundo. Nuevamente  aquí se plantea la necesidad de profundizar con  los cambios para que se logren nuevos modos de producción. Es necesaria la autocrítica, revisar nuestros errores para no volver a cometerlos. También es necesario recuperar el pensamiento de Martí para poder lograr nuestros objetivos.
Finalmente se acordó abordar para el próximo Taller de Lectura algún texto político de actualidad, si es posible en el marco de la II Conferencia Internacional "con todos y para el bien de todos".

Grupo Bariloche de Solidaridad con Cuba, 5 de marzo de 2016