Taller de Lectura Nº 7 – El marxismo del Che

Taller de Lectura Nº 7 – El marxismo del Che

Conclusiones

Este texto fue escrito por Carlos Tablada Pérez a comienzos del año 2005, ante la evidencia del fracaso de las políticas neoliberales, ofreciendo como aporte, el pensamiento marxista del Che. En este taller hemos analizado sus dos primeros capítulos: “Che Guevara como autor marxista crítico” y “El pensamiento económico de Che Guevara”.

En el texto aparecen repetidamente las palabras: conciencia, enajenación, alienación, voluntarismo y determinismo.
Conciencia: Es la expresión de una obligación moral del trabajador.
Dominación enajenante: Sometimiento ideológico, obligar sin permitir el razonamiento, actuar sin razón.
Producir alienación: proceso de transformación de la conciencia. Agrupando ambos términos, podemos decir: “Proceso de alienación enajenante”.
Voluntarismo: Voluntad sobre el entendimiento.
Determinismo: Plantea que todas las cosas ya están previamente determinadas.

El Che como pensador de avanzada, visionario político, con una amplia cultura. Crítico del modelo soviético, vaticinando su fracaso por su carácter dogmático, esquemático, deshumanizado y permeado por los principios económicos e ideológicos del capitalismo.

El Che desarrolló un pensamiento y una práctica marxista alternativa al triunfo de la revolución cubana. Planteó una nueva concepción en la construcción del socialismo, desde la liberación y la desalienación de los trabajadores.
El capitalismo decadente del siglo XX presenta la angustia del hombre enajenado. El marxismo del Che hasta es crítico del propio marxismo, invitándonos a reflexionar.

Che se formó en una familia con ideas socialistas y a los 17 años ya cuenta con conocimientos sobre Marx, Engels y Lenin. A los 25 años sus conocimientos marxistas lo reorientan desde lo profesional médico a revolucionario.

Da cuenta del atraso de los pueblos latinoamericanos y se lo atribuye a la explotación imperialista de los Estados Unidos.
Che actúa y piensa concretamente entre los años 1955 y 1967, íntimamente vinculado a la revolución cubana. El pensamiento de José Martí es fundamental en este proceso, imprimiendo una nueva interpretación del marxismo por parte de Fidel y Che. Hay muchos marxismos y no hay una única interpretación marxista. El marxismo es una herramienta para pensar y no es una doctrina, sino que es un movimiento, una corriente filosófica.

La dictadura del proletariado (dictado democrático de los pueblos) se opone a la estructura de mando de un buró político del partido, y finalmente al mando personal, respondiendo a los intereses de una casta. Con esto sólo se logra la enajenación del pueblo, cosa que ocurrió en la URSS.

Che tuvo el mérito de aplicar lo general de la teoría marxista – leninista a lo particular, que es la construcción del socialismo en Cuba. Che y Fidel se consideran precursores de una nueva concepción en la construcción del socialismo, que va acompañado de la transformación del hombre, haciéndolo más creativo, libre de egoísmo, en un viaje del yo al nosotros.

Si se declara que la propiedad es de todo el pueblo, hay que permitir la participación real de todos los trabajadores en las decisiones políticas.

El marxismo como un arma crítica para revolucionar al capitalismo en manos del pueblo.

Fidel y Che cometieron la herejía de rebelarse contra los dogmas del movimiento comunista internacional, incorporando el pensamiento martiano. Se debe ser marxista con la misma naturalidad con la que se es “newtoniano”
en física o “pasteuriano” en biología.

Se niega la preponderancia de los valores monetarios y materiales, y se elevan los valores morales, donde se pone la economía en función de las personas, en una democracia participativa, sin dogmatismo, eliminando al hombre enajenado.

Fue tan grande la herejía del Che, que anunció en la década del sesenta la caída del campo socialista de la URSS y la restauración del capitalismo. Retornó al estudio original, desde un principio, de Marx y de Lenin, llegando a la conclusión de que la Nueva Política Económica NEP implementada en la Unión Soviética, la llevaría lentamente hacia el capitalismo.

El marxismo es una concepción filosófica del pensamiento, es una herramienta de pensamiento, teoría científica. Es una doctrina filosófica pero no una doctrina política. Cuando se habla de la lucha de contrarios, se refiere de alguna manera a la lucha de clases, en una conceptualización más amplia.

El socialismo no puede prescindir del dinero como valor de cambio, heredado del capitalismo. En el socialismo, la plusvalía es redistribuida por el estado. En Cuba, el Consejo de Estado es el que gobierna por encima de Asamblea Nacional del Poder Popular.

Las pocas contradicciones que tiene el socialismo son propias, por ser un sistema de transición hacia el comunismo.

El movimiento revolucionario socialista, como un movimiento pluralista donde no necesariamente hay unanimidad de pensamientos, sino individualidades que caminan hacia un fin común, que es el objetivo estratégico.

El principal vicio de la Unión Soviética y el socialismo del este fue competir con el capitalismo en el desarrollo del programa nuclear, la astronomóia, etc. Intentar competir con el capitalismo lleva indefectiblemente al capitalismo.

El próximo taller será el sábado 5 de diciembre de 17 a 19 hs en casa 25 de Mayo, donde trataremos los dos capítulos que siguen del mismo texto. Ellos son: “El socialismo y el hombre” y “El socialismo: hecho de conciencia y de organización de la producción”.

Grupo Bariloche de Solidaridad con Cuba