junio 11, 2021

Síntesis, conclusiones y devoluciones del Taller de Lectura Nº 146 - La política yanqui hacia Cuba no va a cambiar

 Síntesis, conclusiones y devoluciones del Taller de Lectura Nº 146

 

 

A raíz de la cuarentena por la pandemia causada por el nuevo coronavirus, a partir del mes de abril de 2020 hemos decidido hacerlo en forma virtual.

 

Haremos nuestra devolución escrita, por mail o por whatsapp, como una  reflexión o una evaluación acerca de la interpretación del texto leído.

 

Para ello hemos elegido una publicación corta para facilitar su lectura tanto en el celular como en la compu.

 

 

“La política yanqui hacia Cuba no va a cambiar”

 

 

Este texto tomado el día 31 de mayo de la página “Razones de Cuba”,  escrito por su editor Arthur González, analiza el criterio del gobierno de los Estados Unidos con respecto a su política exterior, basado en el Estimado de Inteligencia que elabora anualmente la CIA sobre Cuba. A lo largo de 62 años de bloqueo, sin logar el objetivo de destruir a la Revolución cubana, los Estados Unidos han invertido inútilmente miles de millones de dólares. Si bien durante el gobierno de Obama se han flexibilizado algunas de las medidas en contra del pueblo cubano, y luego nuevamente profundizadas con Trump, no han generado cambios en lo que va del actual gobierno del demócrata Joe Biden. Cuba no negocia su soberanía, la defiende con dignidad y con la unidad de su pueblo.

 

Vamos a compartir ahora las devoluciones con las reflexiones, los análisis y comentarios que nos han enviado nuestras lectoras y lectores.

 

 

Devolución Víctor

 

Devolución de Victor C. Rocchi al taller de lectura n° 146 – “La política yanqui hacia Cuba no va a cambiar” - junio de 2021.

 

El título del texto de este taller, es una gran verdad, se comentaba que con los últimos cambios en el gobierno de los Estado Unidos su política hacia Cuba iba a variar después de la desastrosa gestión de Donald Trump; pero la historia de las relaciones con Cuba desde el comienzo de la Revolución no ha cambiado.

 

Hubo un cambio de táctica durante el gobierno de Barack Obama pero esto solo logró reforzar el Socialismo Cubano.

 

Con Trump se eliminaron todas las flexibilizaciones; el pueblo Cubano continuó firme en sostener el socialismo y su forma de gobierno.

 

Ahora con las nuevas autoridades en los Estado Unidos continúan con las presiones económicas con el fin de que haya un cambio político en la Isla a partir de las reformas que se están produciendo en ella, pero los principios que dieron origen a la Revolución continúan firmes y los intentos subversivos siempre terminan en rotundos fracasos.

 

En la actualidad, junto con los intentos desestabilizadores de siempre, están tratando de socavar la cultura (la cubanía), por medio de falsas informaciones en las redes sociales, con un Internet dominado por el Imperio.

 

En Cuba sin embargo se están produciendo grandes logros en salud con el desarrollo de varias vacunas contra la Covid-19 que azota a todo el mundo. Se está vacunando a gran cantidad de personas, se comienza a vacunas a niños y niñas de muy corta edad y tienen un bajo índice de mortalidad.

 

El pueblo cubano sigue firme en sus convicciones porque es un pueblo culto, conocen como actúa ese monstruo como dijo Martí.

 

Pese también a soportar décadas de un bloqueo criminal, el pueblo Cubano sigue venciendo y siempre vencerá.

 

Víctor

 

 

Devolución Ana – Francisco

 

El artículo enumera hechos que reafirman la decisión del pueblo y gobierno cubano de su sistema político, socialista.

Todos los ataques de EE. UU. y sus sucesivos gobiernos, no han podido con esa determinación de ser libres. Respetuosos de la constitución en su art 16, en que las relaciones internacionales se basan en el ejercicio de la soberanía y los principios antiimperialistas.

 

Ana, Fran

 

 

Devolución Marcelo – Alejandra

 

Conclusión taller de lectura 146- junio 2021

 

Es evidente que " se podrá cambiar el collar, pero el perro seguirá siendo el mismo". Este es un dicho que alguna vez me dijo Maxi previo a las últimas elecciones en Estados Unidos. Y así fue.

Cada vez parece más lejana la posibilidad que en algún momento alguna cabeza de la casa Blanca pueda o quiera encarar y encausar este tema utilizando como principio fundamental la coherencia y la dignidad, cosas que todo ser humano debería aplicar en situaciones tan delicadas como esta. Y está falta de sensibilidad y humanismo se genera por el rencor, la ira y el odio que los norteamericanos llevan dentro al sentirse desafiados. De no entender cómo Cuba se atrevió a no hacer caso al mandato natural( el patrón manda, los esclavos obedecen). Nadie en este mundo puede ni debe mojarle la oreja al imperio. La bronca es mucha.

Lo más doloroso tal vez, sea darse cuenta ( y Cuba lo demuestra día a día) que la dignidad no se compra ni se vende por más poder y dinero que se tenga. Y menos se negocia, aunque el resto del mundo vea todas las actos genocidas del "Gran Jefe" y mire para el otro lado. De todas maneras la dignidad de ellos hace mucho tiempo salió a remate.

Si miramos a lo largo de estos 62 años las metodologías y cambios estratégicos que han empleado para hacerle daño a Cuba, a su pueblo y a la Revolución podríamos cambiar el dicho del comienzo y decir: " las víboras podrán parecer distintas, pero el veneno que destilan es el mismo".

 

Ale – Marce

 

 

Devolución Alicia y Maxi

 

El Taller de Lectura N° 146 nos indica que la política yanqui hacia Cuba no va a cambiar a pesar de que no tiene ningún sentido seguir haciendo siempre lo mismo esperando resultados diferentes, que en este caso además fue un rotundo fracaso. Esto la CIA y su Estimado de Inteligencia no lo pueden entender. Pero ellos creen que poniendo cada vez más plata lo van a lograr. La finalidad del gobierno de Estados Unidos es desestabilizar de la Revolución, mediante el bloqueo económico, comercial y financiero, que durante la gestión de Obama giró además hacia los ataques mediáticos por medio de las redes sociales, lo cual tampoco anduvo y es por eso que Trump intentó profundizar el bloqueo con más sanciones y restricciones económicas, pero el resultado es siempre el mismo. La Revolución sigue firme. Ahora es como que se les terminaron las ideas, por eso Biden el demócrata sigue por el mismo camino que el anterior republicano Trump. Ciertamente todas estas políticas desestabilizadoras generan enormes perjuicios al pueblo cubano, pero con su enorme fortaleza que es la resistencia en unidad, no los podrán vencer. La constitución cubana dice claramente que la soberanía y los principios antiimperialistas no se negocian, ni por medios diplomáticos ni económicos ni políticos,  y eso se cumple.

 

Alicia y maxi

 

 

Grupo Bariloche de Solidaridad con Cuba, 05 de junio de 2021

junio 03, 2021

Taller de Lectura # 146 - Junio de 2021

 Taller de Lectura # 146 - Junio de 2021 

A raíz de la cuarentena por la pandemia causada por el nuevo coronavirus, a partir del mes de abril de 2020 hemos decidido hacerlo en forma virtual.

Haremos nuestra devolución escrita, por mail o por whatsapp, como una  reflexión o una evaluación acerca de la interpretación del texto leído.

Para ello hemos elegido una publicación corta para facilitar su lectura tanto en el celular como en la compu.

“La política yanqui hacia Cuba no va a cambiar”

Por Arthur González

Tomado de Razones de Cuba - 31 mayo, 20210

http://razonesdecuba.cu/la-politica-yanqui-hacia-cuba-no-va-a-cambiar/

Muchas personas creyeron que con el arribo de Joe Biden a la Casa Blanca, la política de Estados Unidos hacia Cuba podría mejorar, porque así lo expuso durante su campaña electoral, pero cuando recibió el Estimado de Inteligencia que elabora la CIA sobre Cuba, unido a las presiones de la mafia anticubana en el Congreso, no movió un solo dedo para eliminar las 243 sanciones inhumanas aprobadas por Donald Trump, como parte de la tradicional política de acciones coercitivas.

Biden acaba de ratificar a Cuba en la lista de países que, según ellos, “no cooperan en la lucha contra el terrorismo”, algo que presagia que el pueblo cubano seguirá soportando la guerra económica, comercial y financiera más larga de la historia, con el único fin de matar por hambre y enfermedades a once millones de personas, hecho tipificado en las leyes internacionales como genocidio.

La respuesta de los cubanos ante esa criminal agresión es la resistencia y unidad, medicina que hace infranqueable las defensas de Cuba y desconcierta a los mejores analistas de la CIA, quienes persisten en sus fallidos pronósticos de que “los días de la Revolución están contados”.

62 años de fracasos y miles de millones de dólares malgastados, no le bastan para darse por vencidos y cuando Barack Obama pretendió cambiar de táctica, para desmontar el socialismo desde adentro, los cubanos aprovecharon la oportunidad para desarrollarse, avanzar en sus proyectos y darle a conocer al mundo la verdad que el Bloqueo, y la guerra mediática, no permiten divulgar.

Por esa razón, en cuanto Trump tomó en sus manos las riendas de la política, barrió de un escobazo todas las flexibilizaciones hacia la Isla, bajo el argumento de que no habían tenido éxitos, y regresó a las presiones económicas, con la ilusión de que el hambre y las penurias darían mejores dividendos, aceptó las propuestas de la CIA de incrementar las acciones de subversión política ideológica y aprobó el dinero para fabricar nuevos y más jóvenes opositores, que pudieran atraer a otros actores a sus planes.

Nada es novedoso en esa línea de actuación y al repasar los Estimados de Inteligencia de décadas anteriores, se aprecian los siguientes criterios:

“La actual política de Estados Unidos tiene por objetivo aislar a Cuba y ejercer la mayor presión posible, sin llegar a una intervención militar, para evitar la consolidación y estabilización del régimen. El programa de Acciones Encubiertas de la CIA, está diseñado para apoyar otras medidas gubernamentales y estimular a elementos disidentes”.

“Estas medidas han sido en buena parte, responsables de las actuales dificultades económicas de Castro, pero pudieran aplicarse nuevas y eficaces medidas de guerra económica”.

En mayo de 1967 Henry D. Owen, presidente del Comité de Planificación Política del Departamento de Estado, planteó la necesidad de revisar la política hacia Cuba, basado en que:

“Las medidas de aislamiento han contribuido a crearle dificultades a Castro, pero no lo han sacudido del poder, […] y vale preguntarse, si esta política es la mejor para avanzar con nuestros intereses… La revisión de la política bien podría concluir en que, no se requiere un cambio fundamental, pero podrían explorarse varias estrategias alternativas”.

Meses después, en junio de 1968, Covey Oliver, Secretario Asistente del Departamento de Estado, apuntó:

“Es necesario una aplicación cuidadosa, y sutil en extremo, para no dar la impresión a Cuba, de que finalmente hemos aceptado la permanencia del régimen de una manera inalterable. No debe ponerse mucho énfasis al aspecto de la zanahoria en la política del Gran Garrote”.

El cambio de táctica no se llevó a cabo porque, unos días después, la CIA entregó su Estimado de Inteligencia sobre los problemas y perspectivas de Cuba para los dos años siguientes, donde aseveran:

“Los problemas de Castro han dado un giro hacia el empeoramiento durante el año anterior. Una seria sequía ha deprimido la producción azucarera. Las condiciones de vida se han vuelto más rigurosas, debido a los reducidos suministros alimenticios y a toda una serie de otros factores, incluyendo los intentos de Castro por vencer los problemas económicos, forzando a la población a trabajar más duro. Se ha producido un incremento en el descontento popular y en el número de disturbio locales.  Sin embargo, vemos pocas perspectivas de que la adversidad económica debilite significativamente la posición de Castro”.

El 15 de agosto de 1968 funcionarios de la CIA y del Departamento de Estado, se reunieron para analizar las próximas acciones contra Cuba. Sobre las propuestas presentadas, John W. Ford, Director de la Oficina Interamericana de Asuntos Políticos, envió un informe el 28 de agosto, donde advierte:

“No es el momento más propicio para embarcarnos en un programa de cambio de política, ya que las dificultades económicas actuales de Cuba y las señales de un creciente descontento, indican que las penurias por el aislamiento, están teniendo un efecto real, por lo tanto, debemos mantener toda la presión sobre la política de aislamiento”.

En 1975 la CIA volvía a expresar su oposición a la normalización de relaciones con la Isla y en uno de sus informes argumentó:

“Fidel Castro cree que los Estados Unidos están a la defensiva, dado el incremento de las presiones internacionales y la opinión pública de los estadounidenses para que busquen un acomodo con Cuba”.

La CIA considera que el objetivo final de Castro con el restablecimiento de relaciones diplomáticas, es acabar de poner el sello final de legitimar a la Revolución y dar la apariencia de una Cuba triunfante sobre el imperialismo”.

Los Estimados de Inteligencia actuales son copia de aquellos y por esa razón incrementan su hostilidad, soñando que ahora la Revolución sí se viene abajo, y hacen lo imposible por provocar una revuelta popular a través de las redes sociales.

Equivocados una vez más, por eso la Constitución de Cuba recoge en su Artículo 16, que las relaciones internacionales se basan en el ejercicio de la soberanía y los principios antiimperialistas, en función de los intereses del pueblo, y agrega:

 “Las relaciones económicas, diplomáticas y políticas con cualquier otro Estado, no podrán ser jamás negociadas bajo agresión, amenaza o coerción”.

No se equivocó José Martí al definir a los Estados Unidos como:

“El Norte revuelto y brutal que nos desprecia”.