agosto 25, 2023

Círculo de Lectura # 173 – Septiembre de 2023

Círculo de Lectura # 173    Septiembre de 2023 

“Una entrevista fecunda, siguiendo el ideario del apóstol”

Por Francisco Grass

 Tomado de Razones de Cuba – http://razonesdecuba.cu/

 Que sería de las personas sin esa identidad propia que se apodera de ellos y ellas, y se expande como singularidad única y a la misma vez colectiva.

La historia de los hombres que, impactados por las sinergias contextuales del pasado lejano, se ven materializados en el presente y proyectadas hacia el futuro.

Existen los que sueñan, los que viven con pasión, los que son devorados por el fuego de las causas justas, estos hombres son eternos, no mueren, perduran en la cultura de la humanidad y los pueblos para siempre.

Hay veces, por muy alocado que parezca, se puede hablar con ellos, se pueden formular las preguntas y se pueden saber las respuestas.

Se puede saber que pensaron por cómo vivieron, por sus acciones, por sus escritos, por lo que construyeron o ayudaron a construir, se puede saber que movía su ser cognoscente y espiritual.

De esa forma, basándonos en hechos, es posible entrevistar a un hombre que magnifica y sutilmente se ha materializado en la historia de una nación y continente, a la vez que trasciende como universal para aquellos que luchan por un mundo mejor, con todos y para el bien de todos.

Ese hombre al que tanto mérito se le atribuye es José Julián Pérez Martí, o José Martí, como es comúnmente conocido.

Quede claro, que esta entrevista presentada a continuación, es una entrevista al ideario del apóstol, y aunque se desarrolle de manera singular como si se hablara con él, no pretende insultar su imagen o persona.

Entrevista al Apóstol

¿Cuándo empezó usted Apóstol a interesarse por las injusticias sociales?

·        Fue de niño, a la edad de 7 años, cuando pude ver y entender el maltrato y la discriminación que eran sometidos los esclavos traídos de África a Cuba.

·        Recuerdo que a esa edad visité la ascienda «Hanábana» y vi a esclavo ahorcado en el monte, fue el más horrendo crimen que cualquier persona pudiera presenciar.

·        Este hecho de profundo odio entre seres humanos, la crueldad y el maltrato con que estos hombres y mujeres traídos de África eran tratados, marcó un antes y un después en mi visión del Mundo de aquel entonces y de Cuba particularmente.

·        Años después, tras presenciar tal brutal crimen, nace el poema XXX en mis apuntes de versos sencillos que, de manera poética, pero fiel al hecho, habla del dolor de un niño ante la muerte sin piedad de un ser humano.

 ¿Cuál fue el hecho que más lo marcó en su adolescencia?

·        Sin duda alguna fue el presidio político, mi estancia en las canteras de San Lázaro.

·        Verdaderamente, hasta ese día no era totalmente consciente de la crueldad de la metrópoli española, no solo por mis propias vivencias dentro de ese infierno, el cual dejó una huella profunda de dolor y vacío en mí ser y alma, sino por las crueldades más horrendas que tuve que presenciar y sentir de otros presos que no merecían el trato inhumano con el cual eran tratados.

·        Ejemplo de estas personas son:

·        Nicolas Castillo, un anciano el cual fue vejado por funcionarios de la prisión, sometido con intensa crueldad a torturas físicas y psicológicas.

·        Lino Figueredo, un niño de doce años, a quien vi poco a poco consumirse en la flor de la vida, sometido a los mismos crueles tratos que a los demás presidiarios.

·        Entre muchos otros nombres, como Juan de Dios Socarrás, Ramón Rodríguez y el Negrito Tomás.

·        Por otra parte, nunca vi a mi familia más triste, sus vidas a partir de ese día también se volvieron un infierno, esto obviamente me causaba un inmenso dolor el cual se añadía a muchos otros que cargaba en mi cuerpo y alma día a día en ese oscuro lugar.

¿Por qué escribir el Presidio Político en Cuba (1871) una vez deportado a España? ¿Por qué no continuar con su vida?

·        Bien, no solo por un deber moral y personal, sino para que el crimen se conociese, para que los nombres no fueran a parar al mero olvido o a lo efímero.

·        Se tenía que conocer el verdadero infierno que era la cárcel colonial en Cuba.

·        El presidio es solamente comparable con el «dolor infinito, porque el dolor del presidio es el más devastador de los dolores, el que mata la inteligencia y seca el alma, y deja en ella huellas que no se borrarán jamás» 

·        Sinceramente, (…)»Dante no estuvo en el presidio. Si hubiera sentido desplomarse sobre cerebro las bóvedas oscuras de aquel tormento de vida, hubiera desistido de pintar su infierno. Los hubiera copiado, y lo hubiera pintado mejor»

¿Se gradúa usted de Filosofía y Letras, y Derecho en España?

·        Si, empiezo mis estudios en la universidad de Zaragoza en 1873 y los termino en 1874.

·        La Verdad es que, aunque me gradúo en Filosofía y Letras y Derecho Civil y Canónico, no puedo recibir el título pues no contaba con el dinero suficiente para que el titulo fuera expedido.

Apostol, se conoce que por el tiempo de su estadía en España usted asume, de manera crítica, las ideas de filósofo Friedrich Krausse, ideas introducidas en la península ibérica por Julián Sanz del Río a raíz de la revolución burguesa española

·        Sí, es cierto.

¿Es este su primer acercamiento a la filosofía?

·        No, para ese entonces ya estaban influenciado por las ideas de grandes hombres como José Agustín Caballero, Felix Varela, José de la Luz y Caballero, José María Heredia, y José María de Mendive, mi profesor, el cual es el principal responsable de mi acercamiento inicial a la epistemología con una gran influencia de la propia herencia cultural cubana y universal.

·        Fue gracias a Mendive, y sus enseñanzas, que pude brotar como hombre y compartir con mi pueblo lo que se fraguaba en lo más profundo de mi ser.

·        Es así, como nacen mis primeros escritos, el soneto «10 de octubre» en el periódico «El Siboney», el poema dramatizado «Abdala» en «La Patria Libre», la edición de «El Diablo Cojuelo» en ese periódico también en (1869).

Tomando el contexto de España, usted escribe también La República Española contra la Revolución Cubana. ¿No es así?

·        Si, la escribo en 1873, en el contexto del triunfo de la Republica Española.

Apóstol, ¿qué significados tienen estos escritos para usted? ¿Son vivencias?, ¿criterios personales?, ¿hay algún subtexto detrás de estos?

·        Bueno, esa pregunta se puede contestar con tres palabras Patria, Lucha, e Independencia.

Apóstol, es de mi conocimiento que usted posterior a España viaja por diferentes países europeos como Francia, Gran Bretaña, después Estados Unidos y posteriormente va a México, esto ocurre en 1874-1875. Personalmente me interesa México ¿Qué hace el Apóstol en México?

·        Bueno, el 8 de febrero de 1875, llego a México al estado de Veracruz donde me reúno con mi familia.

·        En México establezco relaciones con Manuel Mercado, quien posteriormente se convertiría en un gran amigo y a Carmen Zayas-Bazán, la cual se convertiría en mi esposa y daría Luz a mi único hijo, José Francisco Martí.

¿Qué nuevas experiencias se lleva usted de su visita por Latinoamérica?

·        La verdad, Latinoamérica me abrió el camino a conocer y entender la lucha de los pueblos, de los obreros, y beber de las ideas de los próceres de la independencia latinoamericana.

·        Por otro lado, me permitió conocer las realidades profundas y ancestrales de la América Indígena.

·        También, es en Latinoamérica donde desarrollo mis habilidades y pasión por el periodismo y la docencia en los campos de la literatura e historia de la filosofía.

¿Hacia dónde se dirige el Apóstol después de su estadía en Latinoamérica?

·        Después de mi estadio en Latinoamérica y en medio del Pacto del Zanjón, arribo a Cuba procedente de Honduras el 31 de agosto de 1875.

¿Qué labores atañen al Apóstol en su segundo viaje a su tierra?

·        En mi segunda visita a Cuba, breve de hecho, de (1878-1879) me dediqué fundamentalmente a participar en reuniones y encuentros sobre todo en el liceo de Guanabacoa, pronunciando diferentes discursos patrióticos, filosóficos, y literarios.

·        Obviamente en agosto de 1879, al iniciarse la Guerra Chiquita, producto a mi accionar revolucionario soy detenido, acusado de conspiración y nuevamente deportado a España.

¿Se queda el Apóstol tranquilo en suelo español una vez que lo vuelven a deportar?

·        Absolutamente, no. En diciembre de ese mismo año (1879) parto hacia los Estados Unidos.

¿Qué ocurre allí en esa tierra de anglosajones? ¿En qué nuevas tares se ve envuelto en suelo norteamericano?

·        Bien, lo más importante es que me doy cuenta que EEUU estaba arribando a la fase imperialista y me percato del gran peligro de su evidente pretensión expansionista, lo que constituía una nueva amenaza para Cuba y Latinoamérica.

·        De ahí, a que, en 1881, me establezca en Nueva York, donde con ayuda de los clubes revolucionarios de emigrados cubanos, empiezo a planificar y organizar la lucha por la independencia de Cuba y Puerto Rico.

·        Para ello, en 1892, en Cayo Hueso, Florida, se funda el Partido Revolucionario Cubano (PRC).

¿Es usted ajeno a las ideas socialistas?

·        No, por supuesto que no, tuve contacto con ellas en los países que visité. Aunque mi primer contacto con ellas fue en España.

·        En aquel entonces se producía una profunda lucha ideológica entre el marxismo y el anarquismo, así como la lucha contra el bakuninismo encabezaba por Pablo Lafargue.

·        Luego en México, país donde surgieron las primeras organizaciones socialistas de América Latina cooperé con el semanario «El Socialista» donde defiendo la causa de los obreros.

·        También, en EEUU a través de obreros alemanes emigrados llegan algunas ideas marxistas a mi persona.

·        Además, en 1891, conozco en Cuba a Carlos Baliño quien abrazara las ideas marxistas y fundara junto conmigo el PRC.

·        Sinceramente, no fui socialista, pues mi entendimiento del socialismo estaba muy ligado al socialismo y anarquismo en el contexto estadounidense de la época, un modelo de sociedad muy ajeno a la realidad cubana de entonces.

·        No significa que no apoyase la causa de los obreros y trabajadores, e incluso que no apoyara la causa socialista de la época. Aunque algunas ideas las asumí de manera crítica.

·        Palabras de elogio no faltaron para el fundador del Marxismo y las causas de los pobres, los explotados y sometidos.

·        Palabras de rechazo tampoco faltaron contra la ideología de los monopolios, el capitalismo y el imperialismo.

Final de la entrevista

·        Apóstol, gracias por su eterna virtud.

·        ¡Es usted un hombre excepcional!

·        A los 170 años de su natalicio el pueblo cubano, su pueblo, se siente profundamente agradecido por su legado y profundamente orgulloso de usted, viva en nuestros corazones para siempre, sea usted esa armonía universal en todos nosotros

 

agosto 08, 2023

Síntesis y conclusiones del Círculo de Lectura Nº 172

 Síntesis y conclusiones del Círculo de Lectura Nº 172

“Discurso pronunciado por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz en la clausura de la Conferencia Internacional Por el Equilibrio del Mundo, en homenaje al 150 aniversario del natalicio de nuestro Héroe Nacional José Martí, el 29 de enero del 2003”

Acá Fidel hace una descripción de la figura de José Martí en ése 150 aniversario de su natalicio y como cierre de la Conferencia Internacional por el Equilibrio del Mundo, en honor a una frase de José Martí: "La guerra de independencia de Cuba [...] es suceso de gran alcance humano, y servicio oportuno que el heroísmo juicioso de las Antillas presta a la firmeza y trato justo de las naciones americanas, y al equilibrio aún vacilante del mundo." Martí, un ejemplo de creador y de humanista, de intelectual y poeta que legara los más profundos principios éticos y patrióticos con los que se llevó adelante todo el proceso revolucionario en Cuba. En septiembre de 2001 el presidente de los Estados Unidos manifestó que las fuerzas militares de su país estaban dispuestas a atacar cualquier oscuro rincón del mundo en una lucha de la civilización en contra del terrorismo, a raíz del brutal ataque a las torres gemelas en Nueva York. El mundo entero se solidarizó con el pueblo norteamericano y condenó ese ataque. Cuba planteó que esa batalla debía ser de carácter político y ético, pero no utilizando el terrorismo de estado universal, con el empleo hasta de armas nucleares, en una guerra planteada desde el más injusto desequilibrio en el plano militar. La anunciada guerra en Irak también ha contribuido al desequilibrio económico mundial, así como el golpe fascista en Venezuela. La desigualdad entre países ricos y pobres con la falta de formación cultural y política, donde la publicidad comercial envenena a las masas con sueños inalcanzables. Menciona acerca del despilfarro de los recursos energéticos y de las múltiples crisis propias del sistema capitalista, incluyendo al propio sistema. Martí nos enseñó que “ser culto es el único modo de ser libre” en una Cuba que a pesar de todas las agresiones económicas ha resistido durante más de cuatro décadas con un notable desarrollo en el campo de los conocimientos básicos y de la cultura política. De él se aprendió acerca del enorme valor de las ideas. De las grandes crisis siempre han surgido las grandes soluciones, donde los individuos no hacen la historia sino a través de las circunstancias en las que les toca vivir. Es por ello que la batalla ha de ser la batalla de las ideas, debemos sembrar ideas y sembrar conciencia.

Durante el posterior debate se comentó que en el año 2003, cuando se desarrolló en La Habana La Conferencia Internacional Por el Equilibrio del Mundo y que Fidel pronunciara éste discurso, se estaban viviendo momentos muy difíciles en el mundo entero, ya que fue cuando el presidente de los Estados Unidos George W. Bush (hijo) manifestó que el Imperio estaba dispuesto a intervenir con todas sus fuerzas militares en lo que ellos consideraban “cualquier rincón oscuro del mundo”, considerando que se trataba de una lucha de la civilización. Justamente por parte de los Estados Unidos que dicen ser el ejemplo de la democracia, y de la defensa de los derechos humanos, cuando le estaban declarando la guerra a la humanidad toda sin importar sus consecuencias. Se comentó también que la Frase: "La guerra de independencia de Cuba [...] es suceso de gran alcance humano, y servicio oportuno que el heroísmo juicioso de las Antillas presta a la firmeza y trato justo de las naciones americanas, y al equilibrio aún vacilante del mundo", se incluyó en el Manifiesto de Montecristi el 25 de marzo de 1895, y fue firmada por José Martí y Máximo Gómez el 25 de marzo de 1895 en la localidad de Monte Cristi (República Dominicana). Se comentó también acerca de lo que significaron en el año 1944 los Acuerdos de Bretton Woods (Estados Unidos). Como consecuencia del enorme negocio que significó para ellos la segunda guerra mundial, hizo que el país del norte se enriqueciera de tal manera que en ese momento atesoraban el 80 % del oro del mundo. Así fue como se creó el Banco Mundial, la Organización Mundial del Comercio, el Fondo Monetario Internacional, y se estableció al dólar como moneda de uso para el comercio internacional. Luego, a raíz de los ingentes gastos que iba representando para los Estados Unidos la guerra en Vietnam, hizo que se iban agotando sus reservas en oro. Tal fue así que en el año 1971 Nixon directamente suprime el patrón oro como respaldo al dólar y más tarde, en 1973, establecieron un acuerdo con Arabia Saudita de negociar los barriles de petróleo sólo en dólares, con lo cual el petróleo reemplazó al oro como respaldo, y así nacieron los llamados “petrodólares”. Pero más adelante cuando el presidente de Iraq Saddam Hussein manifestó sus intenciones de comenzar a negociar el petróleo de su país en divisas diferentes al dólar fue que ocurrió lo del horrendo atentado del 11 de septiembre de 2001 a las Torres Gemelas en Washington, lo que motivó la Invasión a Afganistán y más tarde a Irak, un conflicto bélico que comenzó el 20 de marzo de 2003, con único fin de tomar posesión de la tercera reserva mundial de petróleo y gas que poseía ese país, provocando además la muerte de Saddam Hussein que había dicho que se podía romper con el acuerdo por los llamados “petrodólares”. Así funciona el Imperio.

Por último, acordamos abordar para el próximo Círculo de Lectura, el sábado 02 de septiembre, “Una entrevista fecunda, siguiendo el ideario de José Martí”.

Grupo Bariloche de Solidaridad con Cuba, 05 de agosto de 2023.

Cine Cubano en el Sindicato de Trabajadores Judiciales

 COMUNICADO DE PRENSA

Cine Cubano en el Sindicato de Trabajadores Judiciales

En el marco del ciclo de Cine Cubano y Videos Debate, y en conmemoración del 97 aniversario del natalicio de Fidel Castro, el Grupo Bariloche de Solidaridad con Cuba invita a la proyección de los documentales:

 “Desafío”   y   “Elogio de la virtud”

El primer documental nos muestra lo que significó para el pueblo cubano enfrentar el período especial a partir de la caída del bloque socialista soviético, y el segundo recoge opiniones sobre Fidel expresadas por destacadas personalidades y representantes de la sociedad cubana.         

Duración 50  min.

Las y los esperamos este jueves 10 de agosto a las 20 hs. en el Sindicato de Trabajadores Judiciales, en calle Albarracín 1135 (casi esquina Ruiz Moreno).

Con entrada libre y gratuita.

Invita el Grupo Bariloche de Solidaridad con Cuba.

agosto 03, 2023

Círculo de Lectura # 172 – Agosto de 2023

Círculo de Lectura # 172 – Agosto de 2023

Discurso pronunciado por el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz en la clausura de la Conferencia Internacional Por el Equilibrio del Mundo, en homenaje al 150 aniversario del natalicio de nuestro Héroe Nacional José Martí, el 29 de enero del 2003

Versiones Taquigráficas – Consejo de Estado

Distinguidos participantes en el Encuentro Internacional por el Equilibrio del Mundo como homenaje al Aniversario 150 del natalicio de José Martí;

Estimados invitados;

Compatriotas:

¿Qué significa Martí para los cubanos?

En un documento denominado El Presidio Político en Cuba, Martí cuando apenas tenía 18 años, después de sufrir cruel prisión a los 16 con grilletes de hierro atados a sus pies, afirmó: "Dios existe, sin embargo, en la idea del bien, que vela el nacimiento de cada ser, y deja en el alma que se encarna en él una lágrima pura. El bien es Dios. La lágrima es la fuente de sentimiento eterno."

Para nosotros los cubanos, Martí es la idea del bien que él describió.

Los que reanudamos el 26 de julio de 1953 la lucha por la independencia, iniciada el 10 de octubre de 1868 precisamente cuando se cumplían cien años del nacimiento de Martí, de él habíamos recibido, por encima de todo, los principios éticos sin los cuales no puede siquiera concebirse una revolución. De él recibimos igualmente su inspirador patriotismo y un concepto tan alto del honor y de la dignidad humana como nadie en el mundo podría habernos enseñado.

Fue un hombre verdaderamente extraordinario y excepcional. Hijo de militar, nacido en un hogar de padre y madre españoles, deriva en profeta y forjador de la independencia de la tierra que lo vio nacer; intelectual y poeta, siendo un adolescente al iniciarse la primera gran contienda, fue capaz más tarde de conquistar el corazón, el respeto, la adhesión y el acatamiento de viejos y experimentados jefes militares que se llenaron de gloria en aquella guerra.

Amante fervoroso de la paz, la unión y armonía entre los hombres, no vaciló en organizar e iniciar la guerra justa y necesaria contra el coloniaje, la esclavitud y la injusticia. Su sangre fue la primera en derramarse y su vida la primera en ofrendarse como símbolo imborrable de altruismo y desprendimiento personal.

Olvidado y aún desconocido durante muchos años por gran parte del pueblo por cuya independencia luchó, de sus cenizas, como Ave Fénix, emanaron sus inmortales ideas para que casi medio siglo después de su muerte un pueblo entero se enfrascara en colosal lucha, que significó el enfrentamiento al adversario más poderoso que un país grande o pequeño hubiese conocido jamás.

Hoy, al cumplirse hace unas horas 150 años de su nacimiento, cientos de brillantes pensadores e intelectuales de todo el mundo le rinden emocionados el homenaje del profundo reconocimiento que merecen su vida y su obra.

Más allá de Cuba, ¿qué recibió de él el mundo? Un ejemplo excepcional de creador y humanista digno de recordarse a lo largo de los siglos.

¿Por quiénes y por qué? Por los mismos que hoy luchan y los que mañana lucharán por los mismos sueños y esperanzas de salvar al mundo, y porque quiso el azar que hoy la humanidad perciba sobre ella y tome conciencia de los riesgos que él previó y advirtió con su visión profunda y su genial talento.

El día en que cayó, el 19 de mayo de 1895, Martí se inmolaba por el derecho a la vida de todos los habitantes del planeta.

En la ya famosa carta inconclusa a su amigo entrañable Manuel Mercado, que Martí interrumpe para marchar sin que nadie pudiera impedirlo a un inesperado combate, reveló para la historia su más íntimo pensamiento, que no por conocido y repetido dejaré de consignar una vez más: "Ya estoy todos los días en peligro de dar mi vida por mi país y por mi deber, [...] de impedir a tiempo con la independencia de Cuba que se extiendan por las Antillas los Estados Unidos y caigan, con esa fuerza más, sobre nuestras tierras de América. Cuanto hice hasta hoy, y haré, es para eso."

Semanas antes, al suscribir en Santo Domingo el Manifiesto de Montecristi junto al ejemplar patriota latinoamericano Máximo Gómez, de origen dominicano y escogido por Martí como jefe militar de las fuerzas cubanas, próximo a partir hacia Cuba, entre otras muchas y brillantes ideas revolucionarias, Martí escribió algo tan admirable que, aun a riesgo de aburrir, también necesito repetir: "La guerra de independencia de Cuba [...] es suceso de gran alcance humano, y servicio oportuno que el heroísmo juicioso de las Antillas presta a la firmeza y trato justo de las naciones americanas, y al equilibrio aún vacilante del mundo."

Cuán precozmente escribió esta última frase, que se ha convertido en el tema principal de este encuentro. Nada hay hoy más necesario y vital que ese distante y al parecer utópico equilibrio.

Ciento seis años, cuatro meses y dos días después de la carta de José Martí a Manuel Mercado, y ciento seis años, cinco meses y veintiseis días después del Manifiesto de Montecristi firmado por Martí y Gómez, el Presidente de Estados Unidos, en discurso pronunciado el 20 de septiembre del 2001, ante el Congreso de esa nación, pronunció las siguientes frases:

"Vamos a utilizar cualquier arma de guerra que sea necesaria."

"El país no debe esperar una sola batalla, sino una campaña prolongada, una campaña sin paralelo en nuestra historia."

"Cualquier nación, en cualquier lugar, tiene ahora que tomar una decisión: o está con nosotros o está con el terrorismo."

"Les he pedido a las Fuerzas Armadas que estén en alerta, y hay una razón para ello: se acerca la hora de que entremos en acción, y ustedes nos van a hacer sentir orgullosos."

"Esta es una lucha de la civilización."

"Los logros de nuestros tiempos y la esperanza de todos los tiempos dependen de nosotros."

"No sabemos cuál va a ser el derrotero de este conflicto, pero sí cuál va a ser el desenlace. [...] Y sabemos que Dios no es neutral."

En discurso pronunciado el primero de junio del 2002, al cumplirse el 200 aniversario de la Academia Militar de West Point, el Presidente de Estados Unidos, entre otras cosas, declaró:

"En el mundo en el que hemos entrado, la única vía para la seguridad es la vía de la acción. Y esta nación actuará.

"Nuestra seguridad requerirá que transformemos a la fuerza militar que ustedes dirigirán en una fuerza militar que debe estar lista para atacar inmediatamente en cualquier oscuro rincón del mundo, [...] que estemos listos para el ataque preventivo cuando sea necesario defender nuestra libertad y defender nuestras vidas.

"Debemos descubrir células terroristas en 60 o más países.

[...]

"Enviaremos diplomáticos a donde sean necesarios, y los enviaremos a ustedes, a nuestros soldados, donde ustedes sean necesarios.

[...]

"Estamos ante un conflicto entre el bien y el mal. [...] No creamos un problema sino que revelamos un problema. Y dirigiremos al mundo en la lucha contra el problema."

Me pregunto qué ideas habrían atravesado, a la velocidad de la luz, la genial inteligencia de un hombre como Martí, para herirlo en lo más profundo de su infinito corazón, si hubiese escuchado estas palabras en un mundo donde hoy habitan más de 6.400 millones de seres humanos que, por una razón o por otra, tanto los superricos como los superpobres, ven amenazadas sus esperanzas de sobrevivir.

Aquellas palabras no las pronunciaba un loco desde un oscuro rincón de un manicomio. Están avaladas por decenas de miles de armas nucleares, millones de bombas y proyectiles destructores, decenas de miles de misiles teleguiados y precisos, miles de bombarderos y aviones de combate, con pilotos y sin pilotos; decenas de escuadras y destacamentos navales con portaaviones y submarinos de propulsión nuclear o convencional, bases militares con permiso o sin permiso en todos los rincones del mundo; satélites militares que espían cada kilómetro cuadrado del planeta, sistemas de comunicación seguros e instantáneos, capacidad de aplastar los de cualquier otro país y posibilidad de interceptar simultáneamente miles de millones de conversaciones; arsenales fabulosos de armas químicas y biológicas y presupuestos de gastos militares que se aproximan a 400 mil millones de dólares, con los cuales podrían enfrentarse y resolver muchos de los principales problemas del mundo. Las amenazas mencionadas han sido pronunciadas por quien dispone y puede ordenar el empleo de esos medios. ¿Pretexto? El brutal ataque terrorista del 11 de septiembre que costó la vida a miles de norteamericanos. El mundo entero se solidarizó con el pueblo norteamericano e indignado condenó el ataque. Con el apoyo unánime de la opinión mundial, pudo enfrentarse al flagelo del terrorismo desde todos los ángulos y todas las corrientes políticas y religiosas.

La batalla, como planteó Cuba, debía ser fundamentalmente política y ética, en interés y con el apoyo de todos los pueblos del mundo. Nadie podía concebir la idea de enfrentar absurdas, desacreditadas e impopulares concepciones terroristas que afectan a personas inocentes, aplicadas por individuos, grupos, organizaciones, e incluso algún estado o gobierno, utilizando para combatirlas un brutal terrorismo de estado universal y proclamando como derecho de una superpotencia el posible exterminio de naciones enteras, con empleo incluso de armas nucleares y otras de destrucción masiva.

En este instante, en que se conmemora el 150 aniversario del natalicio de José Martí, el hombre que quizás por vez primera en la historia planteó el concepto del equilibrio mundial, una guerra está por comenzar como consecuencia del más colosal desequilibrio en el terreno militar que jamás existió sobre la Tierra.

Vencía ayer el plazo en virtud del cual la más poderosa potencia del mundo proclamó su derecho unilateral a lanzar su arsenal de las más sofisticadas armas contra otro país con o sin la autorización del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, institución ya de por sí cuestionada por constituir el veto, prerrogativa exclusiva de cinco países que son miembros permanentes, y la negación total del más elemental principio democrático al resto de casi 200 Estados representados en la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas.

El privilegio del veto ha sido usado precisamente por el gobierno que hoy proclama su derecho a pasar por encima de ese Consejo. Muy poco usado por el resto de los cinco, los cambios radicales en la correlación de fuerzas militares entre sus miembros, que se ha producido en los últimos 12 años, hacen casi imposible que tal prerrogativa sea usada contra los deseos de quien no solo es poderoso por su abrumadora potencia bélica, sino también económica, política y tecnológica.

La inmensa mayoría de la opinión mundial se opone a esa guerra anunciada.

Pero lo más importante es que según encuestas recientes, hasta el 65% del pueblo norteamericano se oponía a ese ataque sin la aprobación del Consejo de Seguridad. No constituye esto, sin embargo, un obstáculo insuperable: enviadas las tropas y listas para la acción, necesitadas de ser probadas las armas más sofisticadas, es sumamente improbable que tal guerra no se desate, si las autoridades del país amenazado de exterminio no acceden a todas las demandas de los que los amenazan.

Nadie puede saber o adivinar lo que puede ocurrir en cualquier guerra o situación semejante. Lo único que es posible afirmar es que la amenaza de una guerra en Iraq ha estado gravitando considerablemente sobre la economía mundial, hoy afectada por una grave y profunda crisis que, unida al golpe fascista contra el gobierno bolivariano de Venezuela, uno de los mayores exportadores de petróleo, ha elevado los precios de este vital producto a niveles insoportables para la inmensa mayoría del resto de los países, especialmente los más pobres, aun antes de que haya sonado un disparo en Iraq.

Es ya opinión generalizada que el propósito de la guerra en Iraq es tomar posesión de la tercera reserva mundial de petróleo y gas, lo que preocupa extraordinariamente a casi todos los demás países desarrollados, como los de Europa, que importa el 80% de la energía, a la inversa de Estados Unidos, que apenas importa por el momento entre el 20 y 25% de su consumo.

Ayer 28 de enero a las nueve de la noche, el Presidente de Estados Unidos declaró ante el Congreso:

"Estados Unidos le pedirá al Consejo de Seguridad de la ONU que se reúna el 5 de febrero para considerar los hechos sobre los desafíos de Iraq al mundo.

[...]

"Vamos a consultar, pero que no haya malos entendidos. Si Saddam Hussein no se desarma plenamente, por la seguridad de nuestro pueblo y por la paz del mundo encabezaremos una coalición para desarmarlo.

[...]

"Y si nos obligan a ir a la guerra, vamos a luchar con el pleno poderío de nuestras Fuerzas Armadas."

No se menciona una sola palabra sobre la aprobación previa del Consejo de Seguridad.

Si nos apartamos de las terribles consecuencias de una guerra en aquella región, que la única superpotencia podría imponer a su arbitrio, el desequilibrio en el terreno económico que hoy padece el mundo es de igual modo una enorme tragedia.

Crecen y se profundizan las diferencias relacionadas con los países ricos y pobres, entre ellos y dentro de ellos, es decir, crece el abismo en la distribución de la riqueza, el peor azote de nuestra era, con su secuela de pobreza, hambre, ignorancia, enfermedades, dolor y sufrimiento insoportables para los seres humanos.

¿Por qué no nos atrevemos a decir que no puede haber democracia, libre opción ni libertad real en medio de espantosas desigualdades, ignorancia, analfabetismo total o funcional, ausencia de conocimientos y una falta asombrosa de cultura política, económica, científica y artística a las que solo pueden acceder exiguas minorías, incluso dentro de los países desarrollados, inundado el mundo por un millón de millones de dólares de publicidad comercial y consumista, que envenena a las masas con ansias de sueños y deseos inaccesibles, que conduce al despilfarro, la enajenación, y la destrucción implacable de las condiciones naturales de la vida humana? En apenas un siglo y medio agotaremos los recursos energéticos y sus reservas probadas y probables que la naturaleza tardó 300 millones de años en crear, sin que apenas se vislumbre un sustituto viable.

¿Qué conocen las masas de los complejos problemas económicos del mundo de hoy? ¿Quién les enseñó lo que es el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, la OMC, y otras instituciones similares? ¿Quién les explicó las crisis económicas, sus causas y consecuencias? ¿Quién les dijo que ya el capitalismo, la libre empresa y la libre competencia apenas existen, y que 500 grandes empresas transnacionales controlan el 80% de la producción y el comercio mundiales? ¿Quién les enseñó de bolsa de valores, de especulación creciente con los productos de los cuales dependen los países del Tercer Mundo y con la compraventa de monedas que ascienden hoy a millones de millones de dólares cada día? ¿Quién les instruyó de que las monedas del Tercer Mundo son papeles que constantemente se devalúan y sus reservas de dinero real o casi real escapan inexorablemente hacia los países más ricos, como la ley física de Newton, y las terribles consecuencias materiales y sociales de esta realidad? ¿O por qué debemos millones de millones de dólares impagables e incobrables, mientras decenas de millones de personas, incluidos niños de cero a cinco años, mueren de hambre y enfermedades curables cada año? ¿Cuántos son los que conocen que ya la soberanía de los estados apenas existe, en virtud de Tratados en cuya elaboración no tenemos participación alguna los países del Tercer Mundo, y por los que somos en cambio cada vez más explotados y sometidos? ¿Cuántos los que están conscientes de que nuestras culturas nacionales están siendo cada vez más destruidas?

Sería interminable seguir preguntando. Basta una adicional para los que viven de la hipocresía y la mentira acerca de los más sagrados derechos de los seres humanos, de los pueblos y de la propia humanidad en su conjunto: ¿Por qué no se levanta un monumento vivo a la hermosa y profunda verdad contenida en el apotegma martiano "Ser culto es el único modo de ser libre"?

Lo afirmo en nombre de un pueblo que bajo riguroso bloqueo e implacable guerra económica, a la que se añadió la pérdida casi total de mercado, comercio y suministro exterior al desintegrarse el campo socialista y la URSS, ha resistido inconmovible más de cuatro décadas y hoy constituye uno de los más unidos, socialmente desarrollados, poseedores de conocimientos básicos, cultura política y artística entre todos los pueblos del mundo.

Si en algo hemos sabido honrar al héroe, cuyo fecundo natalicio conmemoramos hoy, es haber demostrado que un país pequeño y pobre, aun cometiendo muchos inevitables errores de aprendizaje, puede hacer mucho con muy poco.

El mayor monumento de los cubanos a su memoria es haber sabido construir y defender esta trinchera, para que nadie pudiera caer con una fuerza más sobre los pueblos de América y del mundo.

De él aprendimos el infinito valor y la fuerza de las ideas.

El orden económico impuesto a la humanidad por el poderoso vecino del norte es insostenible e insoportable. De nada servirán para impedir el curso de la historia las más sofisticadas armas.

Los que durante siglos han suministrado o suministran plusvalía y mano de obra barata son hoy miles de millones. No pueden ser exterminados como moscas.

Van tomando cada vez más conciencia de las injusticias de que son víctimas a través del hambre, los sufrimientos y humillaciones que como seres humanos sufren, más que a través de las escuelas y la educación que les niegan y por encima de las mentiras desgastadas con las que el monopolio, el uso y el abuso de los medios masivos de comunicación tratan de mantenerlos en eterna e imposible sumisión. Han aprendido lecciones elocuentes bastante recientes como las de Irán, Indonesia, Ecuador y Argentina. Sin disparar un solo tiro y aun sin armas, las masas pueden barrer gobiernos.

Cada vez son menos los soldados nacionales dispuestos a disparar y ahogar en sangre a sus propios compatriotas. El mundo no puede ser gobernado con un soldado extranjero portando fusil, casco y bayoneta en cada fábrica, en cada escuela, en cada parque, en cada comunidad grande o pequeña.

Un número creciente de intelectuales, trabajadores instruidos, profesionales y miembros de las capas medias de los países desarrollados se suman a la lucha por salvar a la humanidad de guerras implacables contra los pueblos y contra la naturaleza.

A lo largo de la historia ha quedado demostrado que de las grandes crisis han salido las grandes soluciones, y en ellas y de ellas han surgido los líderes.

Nadie crea que los individuos hacen la historia. Los factores subjetivos influyen, aceleran con sus aciertos o retrasan con sus insuficiencias y errores los procesos históricos, pero no determinan el resultado final. Ni siquiera un hombre tan genial como Martí ―podría decirse igualmente de Bolívar, Sucre, Juárez, Lincoln y otros muchos hombres admirables como ellos― habría sido conocido por la historia de haber nacido, por ejemplo, treinta años antes o después.

En el caso de Cuba, de haber nacido nuestro Héroe Nacional en 1823 y cumplido 30 años en 1853, en medio de una sociedad esclavista y anexionista dueña de plantaciones y enormes masas de esclavos, y sin existir todavía el poderoso sentimiento nacional y patriótico forjado por los gloriosos precursores que iniciaron en 1868 nuestra primera guerra de independencia, no habría sido posible entonces el inmenso papel que desempeñó en la historia de nuestra Patria.

Por ello creo firmemente que la gran batalla se librará en el campo de las ideas y no en el de las armas, aunque sin renunciar a su empleo en casos como el de nuestro país u otro en similares circunstancias si se nos impone una guerra, porque cada fuerza, cada arma, cada estrategia y cada táctica tiene su antítesis surgida de la inteligencia y la conciencia inagotables de los que luchan por una causa justa.

En el propio pueblo norteamericano, al que nunca hemos visto como enemigo ni hemos culpado de las amenazas y agresiones que durante más de 40 años hemos sufrido, podemos percibir, a partir de sus raíces éticas, un amigo y un aliado potencial de las causas justas de la humanidad. Lo vimos ya cuando la guerra de Viet Nam. Lo vimos en algo que nos tocó tan cerca como el secuestro del niño Elián González. Lo vimos en su apoyo a la lucha de Martin Luther King.

Lo vimos en Seattle y en Quebec, junto a canadienses, latinoamericanos y europeos contra la globalización neoliberal. Lo empezamos a ver ya en su oposición a una guerra innecesaria, sin contar al menos con la aprobación del Consejo de Seguridad. Lo veremos mañana junto a los demás pueblos del mundo defendiendo el único camino que puede preservar la especie humana de las propias locuras de los seres humanos.

Si algo me atrevo a sugerir a los ilustres visitantes aquí reunidos sería lo que veo que ya están haciendo. No obstante, a riesgo de cansarlos me permito repetir y reiterar: frente a las armas sofisticadas y destructoras con que quieren amedrentarnos y someternos a un orden económico y social mundial injusto, irracional e insostenible: ¡sembrar ideas!, ¡sembrar ideas! ¡y sembrar ideas!; ¡sembrar conciencia!, ¡sembrar conciencia! ¡y sembrar conciencia!

Muchas gracias.