Círculo de Lectura # 199 – Noviembre de 2025
“FEU-MATCOM:
Los estudiantes tienen la palabra”
Por
Dailene Dovale de la Cruz
La
Tizza Boletín electrónico
Dailene
Susel Dovale de la Cruz es periodista y profesora, especializada en temas
culturales y de enfoque de género/feminista. Imparte clases en la Facultad de
Comunicación de la Universidad de La Habana e integra su Grupo de comunicación
institucional.
*Acababa
el mes de mayo del 2025 y Cuba entraba en una nueva tormenta. Una serie de
medidas implementada sin señas previas visibles por la Empresa de
Telecomunicaciones de Cuba (Etecsa) establecía limitaciones de conectividad a
internet y un alza sustantiva en los paquetes de precios de un renglón cuyos
costos de cara a la población se habían mantenido relativamente bajos desde la
pandemia de la Covid-19, mientras la inflación marcaba la pauta en la mayor
parte de la reproducción diaria de la vida.
En un
escenario en que las redes laborales, económicas, estudiantiles, docentes y
familiares encuentran en lo digital una extensión no menor y difícilmente
sustituible, aparecieron las mencionadas medidas, que dieron en el clavo de un
descontento popular acentuado por carencias, días difíciles en toda norma, poca
luz.
Los
estudiantes universitarios fueron quienes más alto y fuerte levantaron la voz
dentro de Cuba. Entre ellos, resultaron particularmente organizados y decididos
los de la Facultad de Matemática y Computación de la Universidad de La Habana.
Unos manipularon, y hasta intentaron secuestrar, las voces de los estudiantes
para sus agendas políticas; ahí están sus nombres en los grandes medios
empresariales del mundo. Otros cayeron en el paternalismo neutralizador. Muchos
y muchas no hicieron nada. Muchas y muchos intentaron con todas sus
herramientas y sensibilidades políticas establecer, garantizar, mantener e
incluso proteger un diálogo. Silvio Rodríguez les dedicaría un concierto a esos
estudiantes en su propia escalinata meses después.
Por
allá, en medio del vértigo, anduvo por esos días la periodista y profesora
Dailene Dovale, quien realizó el trabajo paciente de conversar y recolectar
testimonios, que son en sí un diario, un minuto a minuto de las emociones y
anhelos de ocho muchachos y muchachas en medio de la convocatoria a la no
asistencia a clases o paro estudiantil de entre el 3 y el 9 de junio. ¿Qué
ocurrió entonces? ¿Qué se siente hoy? Dailene cuenta…
Así que
estábamos en la colina. Sentados en un banco sin demasiada gracia, más allá del
color marrón, bajo el sonido y revoloteo arriba de las aves. Pensaré en el
símbolo de la Facultad de Matemática y Computación y su presencia a lo largo de
estas entrevistas sobre una verdad tan manoseada que rozará en algún modo la
leyenda: la no asistencia a clases por los alumnos de esa institución. Es
lunes, 9 de junio del 2025, pero los protagonistas de este relato no empiezan
su historia aquí, sino el viernes 30 de mayo, en que amanecen con una noticia:
el cambio de tarifas en los servicios de datos móviles de Etecsa. Sobre este
tema, realizamos una entrevista grupal con ocho estudiantes de Matcom,* entre
quienes se incluyen miembros del secretariado, del consejo de la FEU y
presidentes de brigada.
30 de
mayo
Es el
viernes cuando M, estudiante de Matemáticas, comprende los rumores que había
escuchado la víspera. «Nada más que me levanté amanecí con una pila de
mensajes, amigos. Lo que se transmitió fue bastante inconformidad respecto a
estas medidas. Luego vengo para acá a la universidad. Recuerdo que ese día
estábamos cerrando el encuentro de estudiantes en Saber UH con una feria
científica. Entre los que estábamos debatimos respecto a esto».
«Consideramos
que la vía oportuna era hacer un comunicado, donde estas medidas fueran
criticadas en cuanto al costo político y social. Creo que no hubo una FEU que
hablara con otra: “vamos a hacer un comunicado”, sino que muy genuinamente fue
saliendo. “Caballero, hay que hablar”. La terminología depende del modo de
redacción y cómo la hayan mandado. Así fue el contexto del viernes».
El
primero de todos los escritos estudiantiles salió por Boomerang, de FEU-FCOM, y
fue respaldado por el secretariado de Química, el Instec (Instituto Superior de
Tecnologías y Ciencias Aplicadas), la FHS (Filosofía, Historia y Sociología) y
Matcom (Matemática y Computación). Al preguntar sobre este punto aclara: «Al
principio hubo una serie de facultades que demostraron su descontento con
comunicados, que les nació representar a sus estudiantes. Las otras, a lo mejor
no tenían muy clara cuál era esa forma de expresarse y viendo la forma en que
lo hicieron estas, que era políticamente correcta, madura y sensata, dijeron
“vamos a adoptarla”».
«Luego
hubo otras facultades que hicieron comunicados. Ocurrió que había facultades
que estaban esperando un comunicado de la FEU UH. Había facultades que estaban
en plan “nosotros no vamos a actuar separado, vamos a hacerlo como
Universidad”. Como FEU-UH no propone algo en conjunto, hay facultades que no
lanzaron nada. Por eso se da la diferencia en cuanto a tiempo. Hay otras
facultades que deciden actuar inmediatamente».
31 de
mayo
«Desde
el Consejo de la FEU de Matcom ratificamos nuestra inconformidad con las medidas
puestas en vigor por Etecsa y consideramos que la posición adoptada por la
dirección de la compañía no es la más adecuada.
Pedimos
a nuestros estudiantes que se mantengan al tanto de la situación y que esperen
el resultado de las reuniones a celebrar mañana y el lunes con la dirección de
la Facultad y de la FEU, respectivamente. El lunes comentaremos lo decidido y
propondremos, de ser necesario, las medidas a tomar como estudiantes de la
Facultad y de la Universidad de La Habana».
Dailene
Dovale: ¿Por qué elegir a la FEU para encauzar esa protesta?
M: «Hoy
en día los estudiantes cubanos, por lo menos en el contexto en el que estoy,
ven a la FEU como esa organización que tiene una autonomía, que no pondera,
quizás, el interés de otras o la propia institución por encima del estudiante.
Creo que la gente ve a la FEU como esa organización donde se plasma sin muchos
tapujos lo que plantean los estudiantes, en un contexto donde se valoran muchos
riesgos políticos y sociales y, por eso mismo, no se toman acciones. Por eso la
gente ve a la FEU como esa vía de encauzar toda la inconformidad que existía
por el cambio de tarifas de Etecsa. Hoy los estudiantes con lo que más se
identifican es con su propia organización».
Dailene
Dovale: Sin embargo, también surgieron críticas…
M: «Por
supuesto, mientras más pequeña es la instancia de la FEU de la que estamos
hablando más cercana es a la gente, que en las facultades es donde se siente
más representada. La FEU de Matcom, podemos aseverar tranquilamente, que,
representa a su estudiantado. Cuando empiezas a escalar… La FEU de la
Universidad de La Habana no te queda tan claro que esté representando al
estudiantado de Matcom; no solo por una cuestión de claridad en cuanto a la
representatividad, sino que, al ser 17 facultades, hay que llegar a un consenso
entre todos. Igual sucede en la FEU nacional. En las facultades la gente se
siente más representada.
»Pasa
también que mucha gente se ha sorprendido en cómo hoy la FEU ha representado a
sus estudiantes. Quizás pensaban que la FEU era un poco más conservadora, un
poco más tibia. Las FEU de las facultades lo que hacen es representar a sus
estudiantes. Es lo que debían hacer y debieron haber hecho. Es una mala
concepción que se piense que esto que está haciendo la FEU es algo sobrenatural.
Sí es digno de aplaudir, porque llevábamos muchos años tal vez con mucha
tibieza, que se rompa con eso es digno de reconocimiento, pero es su deber. La
FEU hoy cumple el deber por el cual se fundó, representar a su estudiantado. El
deber político y moral es representarlo.
»El
estudiantado de Matcom a nivel de brigada, a nivel de consejo, llega a un
consenso. Se evaluó en cada brigada, puntualmente, cada medida que se iba a
tomar. Con todos estos antecedentes se tomaron las decisiones. Hay que valorar también
las vías y los métodos que se utilicen, pero esas vías y métodos no pueden
venir solo del consejo de la FEU, sino que tienen que venir de una construcción
colectiva. Queda bastante clara la responsabilidad de los líderes estudiantiles
hoy. Ha sido expresado en los espacios de diálogo que hemos tenido, como el que
tuvimos con el ministro, con Etecsa o con la propia rectora. Más allá de esa
conformidad/inconformidad con esos espacios, la gente se siente representada
por parte de esa organización».
Dailene
Dovale: ¿Y cómo llegan a la idea del paro?
M:
«Nosotros nos queríamos hacer escuchar cuando estábamos en proceso de
construcción de la propuesta. Entonces había que tomar una decisión. Intentamos
canalizar todo ese descontento en espacios de diálogo, que dejaron bastante
insatisfechos a los estudiantes. Todos estos encuentros no dejaban una visión
clara de lo que se iba a hacer ante todo eso. Había una inconformidad que había
que canalizar, entendiendo que la manera más tranquila y más sensata era el
paro universitario, que no sale siquiera del consejo de la FEU, sino de los
estudiantes que ponen sobre la mesa la opción de la convocatoria de la no
asistencia a actividades docentes. Además, entendemos esto como una manera de
canalizar todo, antes de que los estudiantes tomaran decisiones por sí solos en
pequeños grupos que podían desvirtuar su sentir genuino (que no querían ninguna
injerencia, sino preocuparse por el país que construyen). Se hicieron encuestas
a nivel de brigada. Fueron aceptadas con brigadas donde hubo más del 90 por
ciento. Ante la insatisfacción, decidimos tomar esta medida».
3 de
junio
Canal
de Telegram de Matcom. 5:18 p.m.
«Teniendo
en cuenta que las explicaciones ofrecidas en los espacios de debate entre
órganos estudiantiles y directivos de Etecsa no han dado soluciones factibles a
los reclamos del pueblo; como universitarios preocupados por el país que
estamos construyendo, convocamos, a partir del miércoles 4 de junio, a los
estudiantes a no asistir a las actividades docentes en forma de protesta hasta
el cumplimiento de cada una de estas demandas:
- La
revocación de las nuevas medidas impuestas por Etecsa el 30 de mayo, o en su
detrimento la eliminación del límite de recargas nacionales mensual, hasta
encontrar nuevas soluciones que se construyan a través de la colectividad.
- La
realización de un encuentro abierto a todo el estudiantado con los principales
responsables de las medidas tomadas; donde se esclarezca detallada y
transparentemente el contexto bajo el que estas se toman. Recalcamos la
disposición de brindar nuestras capacidades intelectuales para un análisis de
la situación.
- La
participación conjunta en la propuesta de solución de todos los sectores de la
sociedad afectados por esta medida».
«Durante
la reunión el 3 de junio, antes de mi intervención, me sentí defraudada,
teníamos muchas esperanzas puestas sobre la reunión, y es cierto que los
funcionarios de Etecsa dieron más explicaciones que en el primer encuentro,
pero insuficientes para el nivel del público universitario que los escuchaba.
Cuando se filtró el video sentí miedo, miedo por lo que me pudiera pasar y no
solo a mí, sino a mi entorno, pero el video es la única evidencia que existe
del cese a las clases, junto a los comunicados de la FEU de la facultad»,
expresó L.
La
importancia de los estudiantes y la FEU en la construcción de propuestas, la
vitalidad de las brigadas y sus representantes como los primeros en conocer su
opinión y criterios son algunos de los puntos en común entre los ocho
estudiantes entrevistados. Otro punto radica en que los resultados al momento
de realizarse la entrevista eran más de carácter simbólico.
«La
efectividad del paro depende en parte de la eficiencia del grupo
multidisciplinario, porque las respuestas reales y justificadas están ahí,
aparte de que nos hicimos escuchar y construimos una mayor relación y confianza
entre estudiantes y la FEU de la facultad. Una de las cosas más importantes es
que movimos el piso de las estructuras de representación que no estaban
funcionando. Ahora los estudiantes van a pensar un poco más a la hora de votar
en una boleta y van a tener más conciencia para elegir a los líderes
estudiantiles, además de sentir que tienen más poder de acción y más voz, así
que en ese sentido el paro fue efectivo».
Dailene
Dovale: ¿Hubo alguna presión externa?
L: «No,
presión externa para seguir el paro no hubo y para detenerlo particularmente
creo que tampoco, había tensión en el ambiente porque no a pocas personas le
incomodaba un paro estudiantil, pero siempre se manejó internamente, [entre]
estudiantes y su consejo FEU».
M: «A
raíz del paro, nos trajeron al ministro de Educación Superior, se nos puso en
una mesa de negociación. Eso apuró también la creación del equipo
multidisciplinario y hoy tenemos en las manos el equipo conformado en las
facultades que ya empezará a trabajar esta semana. Ante toda la frustración,
consideramos que otras vías eran más complejas. Al estudiante de Matcom le
dolió el paro. Tiene ganas de ir a clases, respeta a sus profesores, y creo que
eso da una perspectiva de la inconformidad que había. El estudiante de Matcom
estaba dispuesto a cesar ese proceso, a sacrificarlo en pos de resolver esto,
que se nos dé algo tangible. Si decidimos cesar con las declaraciones de ayer,
independientemente de que hubo avances, tuvimos logros a mí entender
contundentes como la creación del equipo multidisciplinario, que obtuvimos
algo. Es una manera inteligente de volver a las clases con algo en las manos».
Dailene
Dovale: Un punto esencial fue rechazar privilegios y medidas sectoriales.
M:
«Quizás haya que tomar medidas sectoriales, pero con todos los sectores. No con
dos o tres, sino con cada uno. No dejar gente desamparada con estas medidas. Es
una lucha de los estudiantes, pero de los estudiantes como seres sociales, de
estudiantes universitarios para el pueblo y el país que estamos construyendo.
No es solo la medida de Etecsa, la lucha es contra que se tomen medidas con
este impacto social y político tan a la ligera, sin siquiera una consulta. Esta
protesta, a ese nivel, parte de estudiantes preocupados por el rumbo del país.
Estudiantes cubanos que quieren sentirse parte de la construcción de esto, que
quieren que se les tenga en cuenta y se les escuche. Realmente por ahí va el sentido».
S: «Que
haya sido la FEU la que haya tomado la iniciativa de representar a los
estudiantes, ese es su objetivo, ¿no? Esta vez no fue diferente y nosotros
actuamos en consecuencia. Tenemos que tener en claro que nuestra principal
misión es representar la opinión de nuestros estudiantes de la manera que ellos
demanden que sea representada. Al final es el mecanismo que tienen los
estudiantes para expresar sus inquietudes».
E: «Un
primer paso para encontrar la solución y que la gente pudiera tener un poco de
más tranquilidad, sería depositar tu confianza en los profesionales que están
en la facultad, tus propios profesores. En cuanto a ver esos plazos temporales
que estábamos pidiendo, se logró saber que el equipo multidisciplinario iba a
estar conformado por nueve facultades y que iba a estar conformado en esta
semana. Se publicaron los encuentros que tuvimos tanto con el ministro, como
con la rectora en las páginas de Facebook. Sí se hablaba de los encuentros que
tuvimos y además de que eso de alguna manera sí denotaba que lo hicimos con una
actitud para resolver problemas».
Dailene
Dovale: Y a nivel individual, ¿cómo te sentiste a lo largo de este proceso?
E: «A
ver, fue un proceso que a mí me gustó en el sentido de que estuvimos hasta
altas horas de la noche haciendo comunicación. También fue agotador; durante el
proceso, por momentos, se sintió como que no íbamos a lograr nada. Quedo
tranquilizado de que todo el esfuerzo que hicimos realmente tuvo aspectos
positivos. Sí iniciamos ese camino a encontrar una solución y eso es algo muy
positivo que yo creo que logramos en este poco tiempo».
No hay comentarios.:
Publicar un comentario